Por todos es sabido el impacto que provocan los aromas en nuestros sentidos. Siguiendo esta premisa, las marcas de moda han empezado a emitir en sus tiendas perfumes corporativos a fin de reforzar la conciencia de marca e impulsar las ventas a un mismo tiempo.
Ésta es una de las conclusiones que se desprenden del estudio de Worth Global Style Network sobre las técnicas de un nuevo modelo de marketing que se está fraguando en la actualidad: el marketing sensorial.
En este sentido y para las fragancias, se expone el trabajo de ScentAir, una empresa cuya plantilla de clientes está compuesta por conocidas compañías a título internacional, como Bloomingdale’s, Lucky Brand Jeans y Disney. La compañía norteamericana implanta una serie de dispositivos específicos, que realzan los ambientes, crean experiencias memorables y sirven como canal de comunicación de una firma.
De todos es sabido que determinados perfumes afectan de cierta manera a los compradores. Por ejemplo, el olor a polvos de talco provoca que las personas sientan seguridad y nostalgia, mientras que oler cítricos y menta genera alerta.
WGSN destaca que las que más despiertan el consumo son los olores a cuero y cedro, que incitan a comprar mobiliario caro, así como los perfumes florales y cítricos, que son decisivos para que el cliente se demore más tiempo en la tienda y, en consecuencia, consuma más.
Fuente: http://www.reporterasfashion.com/2803/marketing-sensorial-aplicado-a-la-explotacion-de-las-fragancias/
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