¿Tienes unas uñas frágiles o eres incapaz de evitar mordértelas en épocas de estrés? En este caso es probable que te cueste lucir unas uñas bonitas, lo que se traduce en una mala carta de presentación para tus nuevos amigos.Para muchos esteticistas unas uñas decoradas son una de las primeras partes de nuestro cuerpo en que se fijan los desconocidos. Si nuestras uñas están mal cuidadas pueden causar una imagen desastrosa, pero si lucimos unas uñas radiantes habremos ganado muchos puntos.
Las soluciones más comunes para lucir unas bonitas uñas en cualquier época son las uñas de porcelana, a lo que últimamente se han unido las uñas de gel, una opción más práctica y con un precio similar.
Tanto si hablamos de porcelana como de gel se trata de prótesis que irán adheridas sobre nuestra uña original, de forma que a medida que esta crezca tendremos que ajustarlas para que sigan luciendo como el primer día.
Mientras con la porcelana elegiremos un diseño entre los múltiples existentes, con el gel la experta trabajará las uñas sobre nuestras propias manos buscando el resultado deseado.
A medida que crezcan tendremos que reajustar la posición de las uñas de porcelana, mientras que para las de gel podremos optar por rellenar la porción de uña descubierta.
Personalmente me decanto por diseños sencillos que no llamen en exceso la atención. Algo minimalista que ofrezca un toque elegante y distinguido sólo para los ojos que se fijen en ellas.
Fuente: http://www.blogbelleza.es/2010/11/unas-decoradas-de-gel-o-porcelana.html
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